La Rutina....

Hubo una vez en la historia del mundo, un día terrible en el que el odio, que es el rey de los malos sentimientos, los defectos y las malas virtudes, convocó a una reunión urgente con todos ellos.
Todos los sentimientos negros del mundo y los deseos mas perversos del corazón humano llegaron a esta reunión con la curiosidad de saber cual era el propósito.
Cuando estuvieron todos, hablo el odio y dijo:
 - Los he reunido aquí a todos, porque deseo con todas mis fuerzas matar a alguien. Los asistentes no se extrañaron mucho, pues el odio era el que estaba hablando y él siempre quiere matar a alguien, sin embargo, todos se preguntaban entre sí, quien sería tan difícil de matar, para que el odio los convocara a todos.
- Quiero que maten al amor - dijo.
Muchos sonrieron malevolamente, pues mas de uno le tenia ganas.
El primer voluntario fue el mal carácter, quien dijo:
- Yo iré y les aseguro que en un año habrá muerto, provocaré tal discordia y rabia que no lo soportará.
Al cabo de un año, se reunieron otra vez y al escuchar el reporte del mal carácter quedaron decepcionados.
- Lo siento, lo intente todo, pero cada vez que yo sembraba discordia, el amor lo superaba y salia adelante. Fue entonces cuando muy diligente se ofreció la Ambición, que haciendo alarde de sus poderes dijo:
- En vista de que el mal carácter fracaso, iré yo, desviaré la atención del amor, hacia el deseo por la riqueza y por el poder. Eso nunca lo ignorará.
Y empezó la ambición el ataque hacia su victima quien efectivamente cayo herida, pero después de luchar por salir adelante, renuncio a todo deseo desbordado de poder y triunfo de nuevo. Furioso el odio por el fracaso de la ambición, envió a los Celos, quienes burlones, perversos, inventaban toda clase de artimañas y situaciones para despistar al amor, y lastimarlo con dudas y sospechas infundadas. Pero el amor, confundido, lloró y pensó que no quería morir y con valentía y fortaleza se impuso sobre ellos y los venció.
Año tras año, el odio seguía en su lucha enviando a sus mas hirientes compañeros: envió a la frialdad, al egoísmo, la indiferencia, la pobreza, la enfermedad y a muchos otros que fracasaron siempre, porque cuando el amor se sentía desfallecer tomaba de nuevo fuerza y todo lo superaba-
El Odio, convencido de que el amor era invencible, le dijo a los demás:
- Nada que hacer, el amor lo ha soportado todo. Llevamos muchos años insistiendo y no lo logramos.
De pronto, de un rincón del salón se levantó un sentimiento poco conocido que vestía de negro con un sombrero gigante que caía sobre su rostro y no lo dejaba ver, su aspecto era fúnebre como el de la muerte.
- Yo mataré al amor- dijo con seguridad.
Todos se preguntaron quien era ese que pretendía hacer solo lo que ninguno había podido.
El odio dijo: - ve y hazlo.
Tan solo había pasado algún tiempo cuando el odio volvió a llamar a todos los malos sentimiento, para comunicarles que después de mucho esperar, por fin  
Todos estaban felices pero sorprendidos.
Entonces el sentimiento de sombrero negro habló:
-Ahí les entrego el amor totalmente destrozado, y sin mas se marchó.
- Espera! - dijo el Odio - en tan poco tiempo lo eliminaste por completo, lo destrozaste ¿Y no hizo el menor intento para vivir?¿Quien eres?
El sentimiento levanto por primera vez ese horrible rostro y dijo:  Soy la Rutina.

Anonimo.